¿Qué es la práctica docente?
Si bien hay autores que restringen el significado de la práctica docente a las acciones que los profesores realizan en el aula, en este sitio preferimos asumir una concepción que comprende algo más que semejante definición. Así pues, definimos la práctica docente como un proceso caracterizado por la diversidad de situaciones, acciones, acontecimientos y relaciones que ocurren dentro del aula entre docente y alumnos, en función de determinados objetivos y necesidades de formación, aunque su desarrollo está mediado por factores diversos.
De acuerdo con Fierro, Fortuol y Rosas (2000), la práctica docente «es un objeto de estudio complejo, una praxis social, objetiva e intencional en la que intervienen los significados, las percepciones y las acciones de los principales agentes implicados en el proceso de enseñanza y aprendizaje: maestro y alumno, así como los aspectos político -institucionales, administrativos y normativos que cada institución y país delimitan respecto a la función del maestro.”
Vista como proceso, o como praxis social, la práctica docente es compleja y multidimensional, pues en su desarrollo inciden factores vinculados con el marco institucional, el contexto sociocultural, las características de la disciplina a enseñar y aprender, además de las actitudes, valores, concepciones y/o conocimientos que profesores y alumnos tienen respecto de los contenidos de la asignatura, de la metodología didáctica, de sí mismos y del grupo, de lo que significa enseñar y aprender, y de muchas variables más.
Semejante condición, sin embargo, no nos exime de la responsabilidad de realizar nuestra práctica docente en congruencia con las metas o fines formativos de la institución donde se lleva a cabo, para darle la sistematicidad y el sustento necesario. Pero si se trata de reflexionar acerca del significado que tiene en la formación de los alumnos, y la importancia y posibilidades de mejorarla permanentemente, es conveniente tener presente su complejidad y los aspectos que tienden a condicionar su desarrollo.
Como parte de esa tarea está el compromiso de reconocer qué espera la Escuela Nacional Preparatoria (ENP) de sus docentes y de sus alumnos, qué enfoque educativo sustenta dicha institución y qué preparación requieren sus alumnos en una sociedad como la actual. Esto nos llevaría a admitir, al mismo tiempo, la necesidad de emprender y/o continuar un permanente proceso de autoformación disciplinaria, curricular y psicopedagógica.
Para reflexionar…
- Si tomamos en cuenta el concepto de práctica docente aquí señalado, así como la misión educativa de la ENP y las características de los profesores de nuevo ingreso a dicha institución, ¿a qué aspectos de su actualización y profesionalización docente le daría mayor prioridad? Justifique su respuesta.
- ¿Qué conocimientos, habilidades y valores debe poner en juego el profesional de la docencia para que la práctica educativa docente se realice en congruencia con los fines educativos de la institución, las exigencias formativas de la sociedad actual y el conocimiento disciplinar?
Para responder a estas interrogantes recupere y aplique las reflexiones que hace Manuel Castillo (2010) en su artículo La profesión docente, en el cual da cuenta de algunas características o competencias que dan sentido al desempeño docente en el contexto actual. Si lo considera necesario consulte también las reflexiones que hace Fernando Savater (2005) sobre la educación y el papel del maestro en el siglo XXI, en la entrevista titulada El sentido de educar.
Referencias
Fierro, C.; Fortuol, B.; y Rosas, L. (2000), Transformando la práctica docente: una propuesta basada en la investigación-acción. Madrid, Paidós, p. 21.
Práctica docente en la Escuela Nacional Preparatoria 
1. El marco educativo desde el cual se plantea la misión educativa de la ENP parte de un enfoque constructivista. Desde esta perspectiva, el papel del docente cambia del rol tradicional para convertirse en lo que algunos teóricos llaman “un facilitador del aprendizaje”; es decir, el profesor, bajo este contexto, es un experto en los contenidos que transmite y al mismo tiempo, debe proporcionar a sus alumnos las herramientas necesarias para que aprendan a aprender. Es por ello que al estructurar su planeación, debe tomar en cuenta tanto el aprendizaje de contenidos como las habilidades y estrategias que los alumnos desarrollan durante su proceso educativo. El docente de la ENP debe reflexionar sobre la manera en que enseña y sobre la manera en que sus alumnos aprenden, tomando en cuenta la variedad de estilos de aprendizaje, ya que estos estilos determinan en gran medida la forma en que el alumno llevará y construirá su aprendizaje. Es necesario que el maestro propicie en el alumno el desarrollo de diferentes tipos de estrategias. Por lo anterior, es importante que los profesores de nuevo ingreso reciban actualizaciones respecto a la forma en que aprenden los estudiantes y específicamente, sobre los diferentes estilos de aprendizaje y así, conocer y reconocer qué estrategias enseñar y aplicar de acuerdo al perfil de sus alumnos. Aunado a esto, debe conocer el contexto (marco social) en donde se lleva a cabo el proceso de enseñanza-aprendizaje, y por lo tanto, recibir actualizaciones respecto al entorno en que se realiza.
Por otro lado, dentro de la práctica docente se ha mencionado la importancia de las concepciones curriculares o teorías implícitas que tiene el profesor respecto a esta práctica. Como se señala en el artículo de Gómez López, las teorías implícitas son importantes ya que determinan la manera en que se concibe la práctica docente y en consecuencia, la forma en que cada profesor la desarrollará; por lo tanto, es importante estar conscientes de la base a partir de la cual un profesor enseña, cuáles son sus creencias respecto al proceso enseñanza-aprendizaje. Tomando esto en consideración, diversos autores señalan que el desconocer nuestras concepciones curriculares o el no estar conscientes de ellas puede conducir a prácticas educativas erróneas, por lo que es fundamental que los profesores de nuevo ingreso lleven a cabo estudios de actualización respecto a las concepciones curriculares implícitas, que este tema sea una constante en su profesionalización docente para tomarlo como un punto de reflexión frecuente para evaluar nuestro desempeño y gracias a ello, mejorar nuestra práctica.
2. De nueva cuenta, considerando el enfoque constructivista, el docente debe posicionarse en su nuevo rol, de ser el profesor tradicional que sólo enseña contenidos, a ser el experto en la transmisión de esos contenidos y al mismo tiempo, desarrollar en sus alumnos habilidades y estrategias que les permitan hacer significativo su aprendizaje. Es por ello que, de acuerdo al texto de Manuel Castillo, el docente debe poseer ciertas competencias: competencias en la disciplina, en la organización de los contenidos, en la variedad del aprendizaje, en la incorporación de nuevas tecnologías de la educación, en la evaluación y también, poseer competencias en el área de ética y acción educativa (compartir, recibir y dar, toma de conciencia crítica respecto a lo que hace y el contexto en que se desarrolla profesionalmente). Para que la práctica educativa docente sea congruente con el medio en el que se realiza, el profesional de la docencia debe asimismo saber que su tarea es una causa de transcendencia social y humana, como bien lo señala Castillo, y que tiene consecuencias más allá del contexto educativo.
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Me parece una pregunta sibilina. Ya que no podemos favorecer un aspecto por sí solo, yo creo que deben ser todos a la par. Es cierto que al ejercer como docentes en los primeros años no tenemos estas ideas de que es la práctica docente, al menos yo no tenía conocimiento de que existían, hasta este curso. Pero creo que algo que muchos tenemos, es ese sentido común para poder ejercer una práctica docente. De forma que en el día a día, los conocimientos que queremos transmitir a nuestros educandos, sean en la clases de lo más perspicuo posible para nuestros educandos. Y para esto nos podemos valer de distintas técnicas y teorías. Esto lo menciono debido a que uno puede preferir favorecer la parte pedagógica en todo momento, con todo y sus teorías, de manera ciega. Es decir, creer, que si uno lee en artículos pedagógicos y se basa en estas teorías pedagógicas, tendrá una buena práctica docente. Desde mi punto de vista esto es tener una visión paupérrima de la práctica docente. Por otro lado, si digo que desdeño las teorías pedagógicas solo porque no las considero ciencias duras sería una actitud recalcitrante de mi parte. Creo que por lo anterior le daría importancia a todo, tratando de tener una práctica docente equilibrada sin favorecer una idea en específico. Esto es para mí complicado porque podría decir, yo quiero priorizar técnicas pedagógicas, internarme más en tal o cual cosa. Sin embargo, cuantos de nosotros solo ponemos nuestras ideas de lo que deberíamos perfeccionar o darle prioridad y lo que plasmamos en el papel, y lo que escribimos termina siendo algo de lo más pretensioso. Ya que en el día a día, hacemos todo lo contrario, es decir, ni si quiera nos importa que es lo que nuestros alumnos están asimilando, por mucho que seamos los mejores en teorías pedagógicas, las que hayamos leído. Con esto en mente y sin perder de vista, el que una buena práctica docente “ en síntesis para mí” , tiene como finalidad que un educando asimile nuevas ideas por medio del razonamiento y no memorización. Yo le daría preferencia o me gustaría darle prioridad, a tener herramientas para tener una buena autocrítica sobre la relación entre lo que se enseña y lo que se aprende realmente. A esto es a lo único que pondría por encima de cualquier cosa. Y esta autocritica puede constituir una de las mejores herramientas, para crecer de forma profesional. Al final de cuentas la práctica docente es una labor ímproba.
2.
Yo creo que una de las principales características que debe tener un docente, es no perder la habilidad de adaptarse, es decir poder tener esta flexibilidad ante nuevas ideas. Ya sean en cuanto a posibles teorías o posibles nuevas tecnologías. A demás también hay que tomar en cuenta que no todos los grupos a los que les impartimos clases son iguales. Y habrá que adaptarnos a las distintas necesidades de los distintos grupos que tengamos. Tener respeto a las ideas de los educandos y propiciar diálogos entre educando y docente. Creo que este dialogo es de lo más importante en el ejercicio de la docencia. Lo podemos pensar como un quid pro quo entre las inquietudes de nuestros educandos, respecto a la materia que nosotros impartimos y nuestros conocimientos. Creo que las habilidades que uno utiliza son las habilidades propias de la profesión. Quiero decir no voy a intentar poner en práctica algo para lo que no estoy cualificado. También hay que recordad que una buena práctica docente se debe realizar en términos respetuosos y harmoniosos entre ambas partes.
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1. Si tomamos en cuenta el concepto de práctica docente aquí señalado, así como la misión educativa de la ENP y las características de los profesores de nuevo ingreso a dicha institución, ¿a qué aspectos de su actualización y profesionalización docente le daría mayor prioridad? Justifique su respuesta.
Me parece que la prioridad de un aspecto sobre otro no es sino una prioridad coyuntural. Esto es, sospecho que la priorización depende de varios momentos del proceso de enseñanza y lo que este demande en determinado instante. Sostengo, entonces, que la actualización de conocimientos nunca debe dejar de ser prioritaria, así como su correcta transmisión mediante los recursos didácticos adecuados debe ser relevante y prioritario en vista de que unos están al servicio de otros. Es decir, una buena metodología didáctica favorece una mejor transmisión de conocimientos de vanguardia. Así como los nuevos conocimientos normalmente exigen mecanismos más eficaces y distintos para su transmisión. La realidad cambia, y con ello nuestra manera de conocerla, interpretarla y transmitirla. La enseñanza es una trama significativa que se define holísticamente. Esto es, no es posible la autosuficiencia o priorización de uno solo de sus aspectos.
2. ¿Qué conocimientos, habilidades y valores debe poner en juego el profesional de la docencia para que la práctica educativa docente se realice en congruencia con los fines educativos de la institución, las exigencias formativas de la sociedad actual y el conocimiento disciplinar?
Es posible asir esta pregunta desde el ángulo de los desafíos políticos que hoy día enfrenta nuestra sociedad. El statu quo de la sociedad Mexicana plantea que los jóvenes que hoy son formados en el contexto de la educación pública que ofrece la UNAM, deban ser hábiles en la participación activa, social y culturalmente hablando. Adicionalmente, deben poder contribuir al desarrollo de la sociedad en varias de sus facetas, a saber, en el desarrollo productivo, en el desarrollo político y en la moralización de la actividad pública. Por lo menos, estos últimos puntos son destacables en la formación filosófica.
Para lograr tales objetivos, es menester desarrollar aptitudes críticas y deliberativas en nuestros estudiantes. No es un despropósito afirmar que al seno de cada realidad específica de ellos, ocurren diversas situaciones de tensión que han condicionado, condicionan o condicionarán sus respuestas sociales. Hasta hace poco tiempo, en el marco de un programa de la CNDH, se promovió enfatizar la enseñanza de la lógica en el bachillerato, concretamente los temas sobre argumentación. De hecho, debo decir, algunas de las propuestas de modificación del programa de la materia, incluyen y se hacen cargo de esta necesidad de potenciar las habilidades críticas, lógicas y argumentales de nuestros estudiantes. El sentido del programa mencionado era poder argumentar para la resolución de conflictos. Así, el fomento de las aptitudes argumentales pretende introducirlos en el espacio de las razones. Introducirlos en un ámbito de diálogo y coexistencia en armonía. Sostengo que algo de lo que hace una actividad humanística a la enseñanza es su capacidad para integrar al sujeto en una corriente civilizatoria. En ese sentido, la ética y las diferentes materias filosóficas tratan de fundar el marco de ese proceso de inserción social en términos de respeto, consciencia del otro, y conciencia moral. Habilidades sociales que son sostenidas por un desarrollo amplio de habilidades cognitivas, tales como la reflexión, auto reflexión, y la auto consciencia. La idea es que un sujeto consciente de sí y de su entorno es capaz de dotar de sentido moral a su participación pública y política como ciudadano, ya sea en sus acciones lingüísticas y extra lingüísticas.
Desde el punto de vista anterior, es posible sostener que las habilidades puestas en juego por un docente en un contexto tal son la asertividad, la disposición para aprender, la sensibilidad frente a la diversidad y la diferencia, la tolerancia, y la apertura democrática que fomente la participación activa, crítica, convergente y divergente de los alumnos. Las anteriores son aptitudes personales que son demandadas en un entorno social que pide ciudadanos que planteen exigencias desde su ámbito de participación universitaria, pero que aspiran a ocupar ámbitos más amplios de participación social y laboral.
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Maestro Óscar:
Consideramos que los conocimientos, las habilidades, las aptitudes y los valores que plantea como necesarias para el contexto actual son efectivamente muy oportunas porque abarcan distintas esferas de la formación tanto del docente como del alumno.
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Pregunta 1: Si tomamos en cuenta el concepto de práctica docente aquí señalado, así como la misión educativa de la ENP y las características de los profesores de nuevo ingreso a dicha institución, ¿a qué aspectos de su actualización y profesionalización docente le daría mayor prioridad? Justifique su respuesta.
Es complejo determinar qué aspectos de actualización y profesionalización tienen mayor prioridad que otros, principalmente porque los profesores tienen concepciones de la práctica docente muy diversas. Aunado a la perspectiva que cada uno tiene de su disciplina, del contenido que impartirán, de cómo expresar dicho conocimiento frente a sus estudiantes y de la misión educativa de la ENP.
Respecto a esta diversidad, me parece muy interesante la perspectiva de Kuggel que cita Luis Felipe Gómez López en su artículo “Los determinantes de la práctica educativa” donde refiere que la habilidad para enseñar se desarrolla en etapas. La mayoría de los profesores de nuevo ingreso podría incluirse en esta primera etapa en la que la principal preocupación es su situación personal como profesor ante sus alumnos y posteriormente, gracias a la experiencia adquirida, empieza a enfocarse más en los contenidos del curso, en la siguiente en sus alumnos y sigue evolucionando.
Es en esta evolución donde nos concentramos, donde nos preguntamos qué aspectos serán más relevantes para el desarrollo del docente ideal, sin perder de vista que es una concepción a la que no se pueda llegar en la realidad
Pero considero que la profesionalización puede ser más relevante para los profesores de nuevo ingreso (conocer técnicas pedagógicas, internarse en los estudios sobre docencia y pedagogía, conocer a nuestros alumnos y la etapa en la que se desarrollan, la Institución en la que estamos adscritos, los planes y programas de estudios), ya que les permitirá sentar las bases para su desarrollo y de ahí partir hacia la actualización, ya que ésta es una labor que nunca termina, como lo menciona Fernando Savater.
En cuanto a la actualización es importante mencionar la estrecha relación que existe ahora entre la docencia y la tecnología, es una parte esencial que los docentes deben conocer y que de cierta manera los profesores de nuevo ingreso parecen manejar con mayor facilidad dado que nacieron dentro de esta llamada era digital.
Pregunta 2: ¿Qué conocimientos, habilidades y valores debe poner en juego el profesional de la docencia para que la práctica educativa docente se realice en congruencia con los fines educativos de la institución, las exigencias formativas de la sociedad actual y el conocimiento disciplinar?
Los conocimientos y habilidades inicialmente serán los de su disciplina y que son congruentes con los que requiere de él la Institución. Ese sería el primer paso, pero poco a poco dichos conocimientos y habilidades deberán diversificarse, dado que no son suficientes, el profesor debe tener conocimientos en docencia y para ello el Marco Institucional le dará una serie de pautas y elementos con los que deberá cumplir y que le permitirán partir hacia su profesionalización y posterior actualización.
Los valores que entran en juego son aquellos que ha ido desarrollando el docente desde la infancia y que han ido permeando más profundamente en su actividad profesional y su desarrollo personal. Algunos de ellos: Responsabilidad, ética, tolerancia, compromiso, respeto, honestidad y que al conjuntarse con los de la Institución se amplían: Universalidad, Libertad de Pensamiento.
Una vez enlazando los conocimientos, habilidades y valores del docente con la Institución es posible partir hacia la sociedad en la que ambos están inmersos, ambos dependen de las condiciones y situaciones que se viven día a día y deben estar informados para poder generar contenidos (Institución) y expresarlos (docentes) frente a los estudiantes que se desarrollarán en dicha sociedad en el área de su preferencia.
Y finalmente esta triada (Sociedad, Institución y Docentes) realiza investigaciones que le permiten comparar su desempeño con el de otras sociedades, culturas y/o países para mejorar su conocimiento disciplinar y brindarles mejores herramientas a sus estudiantes.
Fuentes:
Gómez L., L. F. (2008). Los determinantes de la práctica educativa. Universidades, LVIII (38) 29-39. Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=37303804
Savater, F. (abril-mayo 2005). El sentido de educar. Altablero. (34). Recuperado dehttp://www.mineducacion.gov.co/1621/propertyvalues-31232_tablero_pdf.pdf, p. 5-6.
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Maestra Alicia:
Muy interesante su propuesta acerca de que la formación del docente debe diversificarse, en un trayecto gradual que va de la formación gradual a la actualización permanente.
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Pregunta 1. Unidad 1. Práctica docente
Le doy mas importancia a aspectos «duros» de la profesionalización docente como la teoría pedagógica y filosofía de la educación; sobre todo a porque la procedencia formativa de los docentes de la ENP es diversa en el sentido de que muchos de ellos no cursaron su formación inicial pensando en ser docentes (habrá maestros que debido esta multiplicidad de huellas formativas puedan omitir o enfatizar aspectos específicos de la misión educativa de la ENP) lo anterior no quiere decir que tengamos que descuidar aspectos internos imprescindibles de la práctica docente como la planeación, diseño y análisis curricular, evaluación,teorías del aprendizaje etc; la actualización es importante pero considero prioritario que siendo la mayoría de docentes de nuevo ingreso nativos virtuales se atiendan aspectos más estructurales del ser docente.
Pregunta 2. Unidad 1. Práctica docente
En el siglo XXI necesitamos regresar a las preguntas fundamentales, cuestionar, distinguir como apunta Savater lo imprescindible de lo interesante, dar prioridad a la reconstrucción del ethos docente más allá de la racionalismo instrumental que ha envuelto todos los campos de conocimiento incluida la práctica educativa,, la profundización en los campos de conocimiento deberá acompañarse de un proceso critico- creativo transformador, la docencia tiene que caminar hacia la constitución de la escuela de los sujetos, incorporando lo mejor de otras tradiciones y racionalidades que han sido subsumidas por la razón racionalidad moderno occidental, el conocimiento disciplinar y la misión de la ENP tienen que ponerse en concordancia con este proyecto, los problemas educativos no tienen en la tecnología una solución por si misma como señalan los discursos pedagógicos dominantes del siglo XXI.
Nota: Las respuestas a estas dos preguntas ya las había elaborado, lo hago de nuevo por que no tuve certeza de que se hayan enviado
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Maestro Carlos: un enorme reto el que nos plantea cuando señala usted que la profundización en el campo del conocimiento debe ser un proceso critico- creativo transformador y que la docencia tiene que caminar hacia la constitución de la escuela de los sujetos, incorporando lo mejor de otras tradiciones y racionalidades que han sido subsumidas por la razón racionalidad moderno occidental.
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1. Si tomamos en cuenta el concepto de práctica docente aquí señalado, así como la misión educativa de la ENP y las características de los profesores de nuevo ingreso a dicha institución, ¿a qué aspectos de su actualización y profesionalización docente le daría mayor prioridad? Justifique su respuesta.
Tal cual se ha ejemplificado en cada una de las sesiones de este módulo, es siempre un reto docente cada grupo, cada materia, cada alumno, por las casi infinitas circunstancias que se ponen en juego en el acto docente durante el proceso del aprendizaje. Así pues, considero que una de las mejores actitudes que puede tener cualquier docente ante este tipo de retos y circunstancias multifactoriales es considerar el concepto que utiliza Manuel Castillo en el artículo La profesión docente, el cual es adaptación. Partiendo de la máxima de que no existe el material didáctico perfecto, y de que se ha tenido la experiencia de que se ha trabajado con alguna actividad que en algunos grupos tal actividad tuvo un impacto satisfactorio y con otro grupo fue toda una decepción; entonces no hay como adaptarse y estar preparado para cualquier tipo de alumno o grupo que se nos presente. Claro que el cuestionamiento a continuación sería si existe el profesor que posea todo el conocimiento de las diferentes teorías pedagógicas para cada caso en particular y cuán complicado y tardado podría ser el adquirir tal conocimiento. Como sea que fuera, Fernando Savater (2005) en el artículo El sentido de educar expone:
Cualquier persona que entre en relación con la enseñanza sabe que su tarea, de transmitir y de asimilar, es inacabable. Una persona que vive de enseñar tiene que estar constantemente abierta a todos los conocimientos, las enseñanzas y lo que pueda mejorarlo como profesor. Cuanto más sabemos enseñar, más nos convencemos de lo que nos falta por aprender. (pag. 5)
Esta apreciación resume, complementa y parafrasea uno de los puntos analizados por Manuel Castillo (2010), en lo que se relaciona a las competencias del profesor, donde comenta:
El aprendizaje es tarea del profesor en la medida que éste enseña a aprender, y que uno de sus roles reconocido es convertirse en un facilitador del aprendizaje. Este planteamiento deja claro que no basta que un docente sea experto en los contenidos, sino también debe serlo en la facilitación del aprendizaje. (pag. 904)
Por lo tanto concluyo que como profesor de nuevo ingreso a la ENP los aspectos de mi actualización y profesionalización docente a los que daré mayor prioridad serán, sin pretender exagerar, a todos. Estoy convencido de que eventualmente se seguirán ofreciendo cursos de actualización docente en los campos humanista y científico, reconozco que todos son igualmente importantes, tanto el del correcto uso de las TIC como el de la psicología en el adolecente, tanto el conocimiento enciclopédico como la enseñanza en valores; de tal suerte hasta lograr ser ese profesor innovador que posee el conocimiento de las diferentes didácticas y que se puede adaptar a las diferentes situaciones que deparan esta profesión.
¿Qué conocimientos, habilidades y valores debe poner en juego el profesional de la docencia para que la práctica educativa docente se realice en congruencia con los fines educativos de la institución, las exigencias formativas de la sociedad actual y el conocimiento disciplinar?
Para que la práctica educativa docente se realice en congruencia con los fines educativos de la institución se necesita tener siempre presente el Marco Institucional de Docencia, considero que es un documento muy claro en el que se plasman las exigencias hacia el profesor y lo que éste debe lograr; además habría que mencionar el correcto cumplimiento del plan de estudios para cada materia. En cuanto a las exigencias formativas de la sociedad actual: el resultado de las lecturas que hice para el SADE, con el propósito de discutir la Formación en valores, fue el reconocimiento de la imperante necesidad de educar en valores. Situación que no es ni ha sido ajena a los principios rectores de la U.N.A.M., y que académicamente se establece a la par de los contenidos. Entonces, además de una constante búsqueda de actualización en los diferentes campos de las ciencias y las humanidades por parte del profesor, que ayuden al bachiller a construir su propio conocimiento para que después éste corresponda al progreso de su país y entorno, también se debe procurar el alma, el espíritu o la conciencia del alumno con la finalidad de que él reflexione acerca de su entorno, su país, su mundo, y la preservación y convivencia de todos los seres vivos. Ahora bien, la práctica docente es un hecho que ha trascendido el tiempo, ésta ha acompañado al hombre desde los albores de la civilización misma y tal vez cada civilización sea consecuencia misma de grandes maestros (Cristo, Buda, Aristóteles, Platón, Zoroastro, etc.) los alcances de la preocupación por cada alumno y el método de enseñanza son simplemente infinitos.
Referencias:
Savater, F. (abril-mayo 2005). El sentido de educar. Altablero. (34). Recuperado dehttp://www.mineducacion.gov.co/1621/propertyvalues-31232_tablero_pdf.pdf, p. 5-6.
Castillo, N., M. (2010). La profesión docente. Rev Med (138): 902-907. Recuperado dehttp://www.scielo.cl/pdf/rmc/v138n7/art17.pdf
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«Quien se atreva a enseñar nunca debe dejar de aprender».
Maestro: ese es el reto que usted nos plantea; los docentes tenemos que aprender permanentemente acerca de cómo mejorar, renovar e innovar la práctica docente.
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PRACTICA DOCENTE. Para reflexionar… pregunta 1. Es un asunto complejo por la diversidad académica de los docentes en la ENP, cuando realizamos práctica docente se pone en juego nuestra huella formativa, la manera en que aprendimos, desde nuestra disciplina tenemos una idea de mundo que se manifiesta en la forma de transmitir o facilitar «saberes»,de la misma manera interpretamos la misión educativa de la ENP, omitimos o enfatizamos en lo que creemos más importante, agreguemos que si hablamos de profesores de nuevo ingreso habrá en muchos de nosotros un universo de teoría pedagógica por descubrir. A partir de lo anterior pensaría que se le debe dar un poco de mayor énfasis a la tarea de la profesionalizacion que a la de la actualización, sobre todo pensando que la actualización vinculada a las TIC queda un tanto saldada porque gran parte de los docentes de nuevo ingreso son nativos virtuales, la profesionalizacion docente atendería la formación pedagógica de los docentes que no la tienen como tal, en donde se desarrollarian las principales categorías que dan soporte a esta ciencia (filosofía de la educación, historia y teoría pedagógica y en un sentido más operativo: planeación, evaluación, curriculum, docencia, investigación,gestión etc) sin perder de vista como menciona Manuel Castillo las competencias o contenidos propias de la disciplina que se imparte , ni la posibilidad ética de transformación que brinda la profesión docente.
PRACTICA DOCENTE.Para reflexionar… pregunta 2. Me quedo con lo que dice Fernando Savater «distinguir entre lo interesante y lo imprescindible», partir de las preguntas fundamentales para recobrar el sentido ético de una práctica docente condicionada por fenómenos como la hiper especialización y la meritocracia académica desprendidas de la racionalidad instrumental reinante. Escoger los contenidos que mejor atiendan la recuperación de una práctica docente congruente con estos problemas; cuestionar cuales son las exigencias del siglo XXI más allá de la versión dominante ( de que la tecnología por si sola aliviara las grandes contradicciones planetarias) pensar en que los contenidos de nuestra materia tienen sentido ( ser-saber-saber hacer) cuando se vinculan con y fuera de las disciplinas para crear sujetos congruentes con una ética de lo cotidiano , subrayo como valor imprescindible en nuestro ejercicio docente la posibilidad etico- creativa de nuestra labor.
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